Opinión
Archive

Una de las mayores preocupaciones para los sobrevivientes de los campos de exterminio nazi, era que el mundo entero se enterara de las atrocidades y horrores cometidos por el gobierno y las tropas alemanas, que no se olvidaran sus incontables sufrimientos y semejante barbarie infernal. El principal activo en esta tarea fue la memoria, tarea no fácil para las personas descuidadas o superficiales.

     Gracias en primer orden a los miles de testimonios por escrito que dejaron aquellos que tuvieron la bendición de salir vivos de los campos de concentración (Auschwitz, Birkenau, Chelmno, Sobibor, Treblinka, Majdanek, Dachau, Buchenwald, Belzec, etc.) es que la humanidad se pudo enterar en detalle de las atrocidades y crímenes cometidos por aquellos monstruos con apariencia humana. Tarea a la que si se le agrega un poco más de lecturas y se toma el tiempo para conocer las acusaciones contra los criminales de guerra nazis presentadas por los fiscales durante loe juicios de Nuremberg; se tiene una idea más precisa de los motivos de aquellos demonios uniformados capaces de asesinar sin piedad ni remordimiento a decenas de millones de personas.

     Cierto, la vida en sí no es fácil, la mayoría de las personas se enfrentan durante su tránsito terrenal a varias o muchas etapas difíciles, y en todas, la memoria juega un papel crucial pues no solamente aporta experiencia y enseñanzas que ayudan, ya sea para evitar o aminorar daños, incluso para sobrevivir, como también para dejar constancia.

     La historia entonces es parte de esa memoria colectiva. Maestra obligada para pueblos, regiones, y naciones, en la que el repaso de los hechos nos puede evitar repetir los yerros del ayer, de caer en los vicios o conductas de diversa índole que tanto daño ocasionaron.

     De ahí la necesidad e importancia de dejar por escrito los sucesos del ayer con la intención de que puedan ser útiles en el hoy o en el mañana, en lo individual o en lo colectivo. Hay textos que se limitan al mero ámbito personal y así se les debe considerar. No obstante, no pocos de estos textos poseen o narran desde la visión personal hechos colectivos de una sociedad que nos incumben a muchos, ya sea por los sucesos narrados, ya sea por las reflexiones que los tales dejaron para beneficio o advertencia de la colectividad en el futuro.

      Nuestro país posee un rico acervo de memorias personales que con el paso del tiempo se han convertido en valiosos documentos públicos. Vienen a la mente las “Memorias de mis Tiempos”, de Guillermo Prieto, “Los Bandidos de Río Frío” de Manuel Payno, “Visión de Anáhuac”, de Alfonso Reyes, “Memorias de España”, de Elena Garro (durante la guerra civil), sin olvidar los textos de mexicanos excepcionales, como es el caso de Fray Servando Teresa de Mier, José Joaquín Fernández de Lizardi, Francisco Zarco, Vicente Riva Palacio, y tantos, y tantos más.

     Al cerrar el siglo veinte, presenté en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, mi libro “MEDIO SIGLO; VIVENCIAS Y TESTIMONIOS” (diciembre del año 1999). Un texto en el que dejé por escrito los hechos vistos desde mi propia experiencia y óptica a partir de mi nacimiento (1950) en el populoso barrio de San Juan de Dios en esta ciudad de Guadalajara, mi entorno, educación, ciudad, Estado, País, así como aquellas vivencias personales y hechos públicos de los que fui testigo de época (Movimiento estudiantil de 1968, las Olimpiadas, el Movimiento estudiantil aquí en Guadalajara en el año 1970, al igual que diversos hechos que de alguna forma nos atañen a todos y, otros, como ya señalé, que aunque son del orden estrictamente personal pueden resultar útiles también, pues no podemos olvidar que somos seres gregarios y nuestros hechos o inacciones pueden ayudar o perjudicar a otros. No debemos desatender de que el hombre tiende a imitar o a experimentar en el otro, sea en lo positivo o en lo negativo.

 

PRESENTACIÓN NUEVO LIBRO

 

          Bajo esta misma visión he escrito y publicado un nuevo libro titulado “PENSAMIENTOS Y VIVENCIAS EN EL ATARDECER DE MI VIDA”, el cual recoge hechos vistos o analizados por quien lo escribe, así como vivencias y reflexiones personales a partir del año 2000 y hasta el año 2023. En doce capítulos, y entendido de que ya no se lee tanto como antes, en 200 páginas dejo mi visión de las cosas, incluyendo, claro está, la terrible situación política, social y de violencia que padece México. El libro se presenta el próximo jueves 7 de diciembre, a las 7:00 p.m., en Casa Zuno de la Universidad de Guadalajara (Av. Unión No. 226). Me dará mucho gusto la presencia de mis amigos y lectores que decidan acompañarme.

¡Hasta el próximo sábado si Dios nos permite!

Tiempo de lectura: 4 min