¿Y EL PAÍS PRESIDENTA?
El envió de veintinueve narcotraficantes mexicanos a petición del gobierno de Estados Unidos, además de ser algo casi inédito (por el número e importancia de estos archicriminales), va a ocasionar o producir una serie de reacomodos y reacciones negativas que es necesario anticipar y atender para que no se haga un mayor daño a México del que la 4-T ya le ha hecho (con su destrucción irresponsable y sistemática).
La presidenta Claudia Sheinbaum y el poco gabinete que está de su lado (que no obedece únicamente a las ordenes del dictador de Macuspana) tienen que sacudirse de la modorra y anticiparse a las reacciones dentro del país, pues en las de fuera están más que atentos a resolver. El envío a manera de regalo al agresivo y engreído dictador de pelo naranja de los 29 capos, y sus cercanos, no requiere de más explicaciones, por lo que sus acciones, de manera urgentísima, deben abocarse a lo largo y ancho del país —y con toda la fuerza del estado mexicano— para detener y anticiparse a los narco terroristas donde quiera que aparezcan a querer hacer más daño.
Un gobierno debilitado por diversas razones, todas ya conocidas, debe considerar que algunos de sus protectores (y benefactores de campañas), ahora entregados a Estados Unidos, se le rebelen y pretendan cobrar venganza contra inocentes causando balaceras, caos y terror, en diversas zonas del país.
Y si por más de seis años sólo les dieron abrazos y tanto el Ejército como la Guardia Nacional no los tocaban, los asesinos —que eso son todos ¡ASESINOS!—; engreídos y endemoniados que únicamente ven en el pueblo mexicano a sus víctimas indefensas contra las cuales se enseñorean a diario despojándoles de todo, absolutamente todo: vida, bienes, trabajo, familia, tierras; es de esperar que como bestias heridas arremetan contra todos, y aquí es donde el gobierno debe anticiparse. En lugar de espiar a escritores, periodistas, críticos y enemigos políticos, utilice ese aparato para conocer las intenciones y atajarles antes que causen daño.
La presidenta debe entender, por bien de México (y de su propio gobierno) que no es momento para la criticada (y reprobable) REFORMA JUDICIAL, ya que de empecinarse con el berrinche de su antecesor lo único que traería sería más caos y violencia. Como se dice coloquialmente “no está el horno para bollos”. Cierto, se necesita una reforma en la impartición de justicia que garantice ser gratuita, pronta y expedita, lo cual no sucede en este momento, se deberá esperar el momento adecuado, y nada de elección, sino una mejora de lo que ya se tenía corrigiendo vicios y defectos ¿La compra y distribución de medicinas no les dejó enseñanza alguna?
El actual gobierno también debe entender que estamos a un paso del COLAPSO ECONÓMICO, no solamente por la amenaza de los aranceles del golpeador Trump, sino al considerar la enorme deuda pública (externa e interna) y la ausencia total de nuevas inversiones. No es de sobra decir que las condiciones en que recibió Zedillo eran un poco mejores que las actuales. Los alfileres se pueden caer en cualquier momento y este gobierno de improvisados (para no decirles con mayor propiedad) no tiene la menor idea de cómo se resuelvan problemas de semejante magnitud.
Por otro lado, la economía de la inmensa mayoría de los mexicanos, esa que sostiene al 80 por ciento de las familias (micro, pequeñas y medianas empresas o negocios), cada vez está más agraviada y sometida por las bandas criminales, convirtiendo la vida de millones de personas en una neo esclavitud, en la que sus vidas, bienes y familias están a merced de los criminales, y la entrega de los capos, lo más probable es que produzca irritación y mayor abuso de su parte.
Presidenta Claudia Sheinbaum: ¡A la inmensa mayoría de los mexicanos no les interesa si condenan a muerte al “chapo”, al “mayo”, a caro” y demás fauna nociva que tanta sangre han derramado en México! Ni que decir del tantísimo daño.
A los mexicanos les interesa que su gobierno les defienda de los criminales, les conceda un servicio de salud adecuado, una educación de buena calidad, así como mantener y crear la infraestructura nacional que nos permita salir del hoyo en que nos han metido tanto los criminales, como gobiernos anteriores, Pero sobre todo el de Andrés Manuel López Obrador. Usted nunca ha probado la gratitud del pueblo mexicano, pues, hasta ahora sólo voltea hacia Palenque. ¡Mire y atienda a los ciudadanos, no en la retórica desde Palacio, sino en la realidad cotidiana y tenga por seguro que sí pasará a la historia, no como una traidora y ambiciosa más (de los muchos que hemos padecido), sino como la Presidenta(e) que necesitamos todos!
¡Hasta el próximo sábado si Dios nos permite!
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